Sputnik 11 de enero del 2022, MOSCÚ.- El Banco Mundial augura que el crecimiento económico mundial se desacelere al 1,7% en 2023, informó el banco.

“Nuestras previsiones más recientes apuntan a una desaceleración aguda y duradera, con una disminución del crecimiento global al 1,7% en 2023 desde el 3% pronosticado hace solo seis meses”, comunicó.

Según el banco, el aumento de la inflación, el aumento de las tasas de interés, la disminución de la inversión y las consecuencias económicas del conflicto en Ucrania son los factores que frenan el crecimiento de la economía.

Agregó que debido a la situación económica actual, cualquier nuevo evento negativo “podría empujar a la economía global a una recesión”.

El banco también pronostica que el crecimiento de las economías desarrolladas disminuirá al 0,5% en 2023 desde el 2,5% en 2022.

“Para fines de 2024, el PIB de los países de economías en transición y en desarrollo estará alrededor de un 6% menos del nivel que se esperaba antes de la pandemia”, indicó.

El Banco espera que la inflación mundial disminuya pero se mantenga por encima de los niveles previos a la pandemia.

Reducción del PIB ruso

El Banco Mundial mejoró su pronóstico de la contracción del producto interno bruto (PIB) ruso en 2023 y prevé que ese índice disminuirá en un 3,3%.

En octubre del año pasado, la organización financiera pronosticaba para 2023 una disminución del PIB de un 3,6% en 2023.

“Se espera que el PIB de Rusia en 2023 se reduzca nuevamente en un 3,3% debido a la implementación completa del embargo petrolero de la Unión Europea [UE] y a la reducción de las exportaciones del gas natural debido al cese de los suministros rusos a la UE a través del gasoducto Nord Stream 1”, señala el informe actualizado del banco.

En cuanto a 2024, el Banco Mundial augura un crecimiento del PIB del 1,6%, gracias a “una expansión moderada del consumo y una leve recuperación de las exportaciones”, que Moscú reorientará a otros países.

Expectativa del crecimiento de México

El Banco Mundial revisó a la baja sus proyecciones de crecimiento económico para México a 0,9% en el año que comienza, que es una estimación menor al 1,5% previsto en octubre pasado, según sus Perspectivas Económicas Mundiales.

El moderado crecimiento esperado para México este año se deriva del impacto de “condiciones monetarias restrictivas (elevadas tasas de interés), la inflación persistentemente alta y la merma en las exportaciones por el lento crecimiento de EEUU”, indica el documento.

Ese pronóstico se coloca debajo del 3% anual para 2023 estimado por el Gobierno mexicano en su Presupuesto Federal aprobado por el Congreso a finales del año pasado.

Por otra parte, el organismo mundial elevó su proyección para el cierre del 2022, a 2,6%, arriba del 1,8% previsto hace tres meses. El BM anunció además en su documento que, para 2024, la segunda economía latinoamericana avance un 2,3%.

El organismo también estima que el menor crecimiento de la economía mexicana se inscribe en la reducción del crecimiento de América Latina y el Caribe.

La previsión para la región latinoamericana y caribeña es que aminore en 2023 su crecimiento, a 1,3%, después de haber crecido 3,6% en 2022; y espera que se recupere a 2,4% en 2024. El BM prevé que, debido a un lento crecimiento de EEUU y China se reduzca la demanda de exportaciones, uno de los principales motores de la economía mexicana.

Por otra parte, los expertos del organismo estiman que el aumento de las tasas de interés estadounidenses probablemente implique que las condiciones financieras seguirán siendo restrictivas en la economía mexicana.

Además prevé que el comportamiento del principal socio comercial, EEUU, sea la causa de un menor flujo de remesas y exportaciones menos dinámicas.

El dato oficial del crecimiento de la economía mexicana en 2022, será publicado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía el próximo 24 de febrero.